Los servidores de correo electrónico ayudan a proteger los datos de los usuarios, así como la seguridad de la información contenida en un mensaje.
Y la seguridad de la información, cabe recordar, es una premisa básica de la Ley General de Protección de Datos (LGPD), que deben cumplir empresas y profesionales.
Las filtraciones de datos generan multas de hasta el 2% de los ingresos de la empresa por cada infracción. Por no hablar de las sanciones que los infractores están obligados a cumplir.
El spam, portador de fraudes de fuga de datos (phishing y ransonware), es una amenaza constante no sólo para la seguridad en línea, sino también para quienes trabajan con el marketing por correo electrónico.
De una forma u otra, el spam provoca el bloqueo de las listas de correo. Esto perjudica la reputación de los remitentes, que pierden inversiones en comunicación y también son susceptibles de sanciones en virtud del GDPR.
La verificación del correo electrónico elimina todo el spam de las listas para mantenerlas saludables con clientes potenciales reales.
Los servidores de correo electrónico identifican a los remitentes, el cuerpo del mensaje y la dirección de los destinatarios. Esto es extremadamente beneficioso para la seguridad en línea.
Sigue leyendo para saber qué son los servidores y cómo protegen los datos.
Índice
- ¿Qué son los servidores de correo electrónico?
- Cómo funcionan los servidores de correo electrónico
- Protocolo de salida
- Protocolos de entrada
- Diferencia entre servidores y proveedores
- ¿Por qué es importante saber estas cosas?
- Servidores de correo electrónico dedicados y compartidos
- Conclusión
- Preguntas frecuentes
¿Qué son los servidores de correo electrónico?
Los servidores son servicios que envían y reciben mensajes. Cuando envías un correo electrónico, tu servidor se comunica con el servidor del destinatario para enviar el mensaje.
En otras palabras, el servidor de correo electrónico se encarga de transferir mensajes entre dispositivos.
Cómo funcionan los servidores de correo electrónico
Existen 2 tipos de servidores: salientes y entrantes. Están presentes en todos los dispositivos que envían y reciben correos electrónicos.
Entendamos qué son y cómo funcionan los protocolos de los servidores:
Protocolo de salida
SMTP: Protocolo Simple de Transferencia de Correo – es el protocolo utilizado para enviar todos los correos electrónicos. Funciona en dos fases: en la primera, comprueba el remitente y toda la información del mensaje.
En la segunda fase, SMTP define dónde se entregará el mensaje (POP3, IMAP o Exchange, como veremos más adelante). Si el mensaje no puede entregarse, vuelve al remitente.
Protocolos de entrada
Existen tres protocolos utilizados para recibir mensajes:
POP3: Post Office Protocol – se encarga de hacer llegar el mensaje al dispositivo al que está conectado el destinatario (por lo que el mensaje sale del servidor y se conecta al dispositivo del usuario).
Este protocolo sólo permite al destinatario acceder al mensaje a través del dispositivo al que se conectó en primer lugar. Esta “limitación” crea una mayor seguridad en línea.
IMAP: Internet Message Access Protocol (protocolo de acceso a mensajes de Internet): a diferencia de POP3, el protocolo IMAP almacena los mensajes entrantes en el servidor, lo que permite acceder al mensaje desde distintos dispositivos.
EXCHANGE: más utilizado por quienes trabajan en empresas (ya que permite integrar aplicaciones como calendarios, etc.) y también por quienes prefieren utilizar teléfonos móviles para enviar y recibir correos electrónicos. Al igual que en IMAP, los mensajes se almacenan en el servidor.
Diferencia entre servidores y proveedores
Los proveedores (Gmail, Yahoo, Outlook, entre otros servicios gratuitos y de pago) se encargan de dirigir el mensaje dentro del correo electrónico. Por ejemplo, en Gmail tenemos la bandeja principal, la de promociones, la social y la de spam.
En primer lugar, el mensaje llega al puerto del servidor SMTP del destinatario, que lo reenviará a POP3, IMAP o Exchange.
Después, el mensaje entra en los criterios del filtro antispam del proveedor, que determinará en qué carpeta se depositará el mensaje.
¿Por qué es importante saber estas cosas?
Conocer los protocolos de los servidores de correo electrónico evita imprevistos, que a su vez pueden hacer que los mensajes sean rebotados por los servidores.
En el mundo del email marketing, un email rebotado es un rebote. Y eso es exactamente lo que los profesionales del marketing deben evitar, ya que el 3% de ellos provocan el bloqueo de las listas.
Además, es esencial que el remitente de los correos electrónicos masivos siga correctamente los protocolos de Internet para tener una reputación garantizada.
De lo contrario, los correos electrónicos pueden ser enviados a las bandejas de spam, poniendo en peligro la entregabilidad de las campañas.
Servidores de correo electrónico dedicados y compartidos
La dirección IP, junto con el dominio de los remitentes de correos masivos, forman la reputación del remitente.
Este elemento es de vital importancia para la entregabilidad, ya que los remitentes con una reputación baja son bloqueados y posteriormente sus nombres se envían a listas negras internacionales.
Los servidores dedicados son servicios exclusivos que sólo atienden las demandas de la empresa. De este modo, la seguridad es mayor porque la empresa es la única responsable de su reputación. Esto se traduce en un coste más elevado.
Los servidores compartidos, en cambio, reúnen IP y dominios de diferentes remitentes. Como resultado, las cuentas pueden influir en la reputación de las demás.
Conclusión
Es importante controlar las normas que rigen el envío y la recepción de correos electrónicos. Por ello, conocer qué son y cómo funcionan los servidores es fundamental para que los profesionales trabajen con seguridad y eviten sorpresas desagradables que puedan poner en peligro las inversiones en email marketing.
Preguntas frecuentes
Los servidores están presentes en todos los dispositivos que envían y reciben correos electrónicos, y su función principal es garantizar la transferencia de mensajes entre remitentes y destinatarios.
La seguridad también es una función de los servidores, ya que los SMTP contienen información sobre los remitentes, el cuerpo del mensaje y la dirección de los destinatarios.
El servidor se encarga de alojar y transferir los mensajes, y el proveedor es el servicio que dirige y organiza los correos electrónicos en las bandejas de entrada de los destinatarios.
Los servidores dedicados son los servicios exclusivos de alojamiento de IP y dominios de una sola empresa. Los servidores compartidos, en cambio, reúnen en un único servidor las IP de varios remitentes de correo electrónico.